En este templo trabajaron Hernán Ruiz I y II y destaca al exterior por su espléndida portada plateresca de granito y la torre-campanario de estilo gótico, ambas del siglo XVI. En la portada nos sorprende la abundancia de símbolos y detalles que la convierten en un auténtico retablo callejero y los escudos de armas de los Sotomayor y Zúñiga, artífices en gran medida del legado patrimonial que atesora esta comarca.
Acompañados por Sara, de la empresa Tureventos Pedroches, encargada de la gestión de la Oficina de Turismo de Hinojosa del Duque, a quien agradecemos su amabilidad y atención, visitamos el interior de la Iglesia.
El retablo mayor es de estilo neogótico y fue realizado en los años cuarenta, pues el anterior fue destruido durante la Guerra Civil junto con otros retablos e imágenes. Se cubre con unas bellísimas pinturas barrocas que recrean la figura del titular del templo.
El granito vuelve a aparecer en el interior, esta vez en forma de pilares y arcos apuntados, haciéndose omnipresente en la puerta de acceso a la sacristía y, sobretodo, en la Capilla del Baptisterio.
Las naves laterales se cubren con bóvedas estrelladas, mientras que un magnífico artesonado mudéjar corona la nave central.
Por último subimos al coro, desde donde pudimos contemplar todo el templo y conocer mayores detalles sobre su reciente y acertada restauración.
Tras la visita a la "Catedral de la Sierra", realizamos una breve parada junto a la Ermita de Santa Ana, la más antigua de la localidad (siglo XIII), donde según la trradición Alfonso VIII asistió a misa después de la batalla de las Navas de Tolosa.
Para recuperar fuerzas finalizamos la visita a Hinojosa del Duque con una abundante y deliciosa comida en el Restaurante El Cazador.
1 comentario:
Esta catedral de la sierra es una maravilla,claro como no,yo soy de alli,jejeje
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